Para optimizar el número de equipos a disponer en cada obra, es necesario realizar un estudio detallado de las unidades de obra que consta el proyecto, el emplazamiento, y el espacio necesario para desarrollar las obras. Esto se hará siguiendo los criterios de importancia económica dentro del presupuesto global, complejidad técnica, o cualquier otro motivo que condicione de manera considerable la programación de las obras o necesite por sus características de medios técnicos especiales.
A partir de este estudio se determinarán los medios necesarios para ejecutar los trabajos. A la hora de formar los diferentes equipos se tendrá en cuenta los volúmenes de la actividad, los diferentes condicionantes que implican la ejecución de una obra, de la maquinaria idónea, tanto en lo referente a rendimientos, como a minimizar las molestias que esta obra pudiera ocasionar.